En sus marcas listos ¡a la feria!

El ánimo y la energía completa de la ciudad cambiaron. En verdad se nota que la gente bonita se prepara para la feria.

Había olvidado que estamos en feriados, por estos rumbos no se escucha nada y, además, tampoco hay caos vial, en fin, el chiste es que fuimos a la panadería y en el centro comercial había una chica del servicio pasando el trapeador en minifalda y tacones, nos llamó la atención y fue cuando recordamos que es el tiempo de ponerse guapetón para ir a dar la vuelta.

Continuamos nuestro recorrido y vimos a varias chicas muy arregladas esperando taxi, era indudable, el efecto feria había llegado ya a todos los rincones de la ciudad y todos se alistaban para convertirse en feriantes de media tarde.

Fue entonces cuando recordé que la Comunidad Feminista de Aguascalientes en coordinación con Seguridad Pública, la Unidad de Atención a la Violencia de Género (UAVI), el Instituto Municipal de la Mujer de Aguascalientes (IMMA) dieron a conocer el programa Punto Seguro. Ahora, llegó el momento trabajar en contra de la violencia en el Módulo Punto Seguro a un costado del Stand de Municipio.

Lo que se busca, en general pues algunos lo hacemos de forma personal si nos animamos a ir a la feria, es poder caminar y bobear en el perímetro ferial sin ser presa de una nalgada, miradas lascivas o piropos mal encausados.

Honestamente, muchas de nosotras vamos a la defensiva listas para que nuestras antenas nos digan hacia donde no caminar por aquello de que en momentos el gentío no nos permite estar con una distancia moderada los unos de los otros y es ahí cuando los “graciosos” es decir, los agresores hacen de las suyas.

Nuestra dinámica familiar, con el paso de los años, es bajar del estacionamiento, caminar al foro del lago o de las estrellas, salir del concierto en la misma dirección y siempre juntos, sin separarnos si hay muchedumbre. Así hemos evitado robos y malos momentos.

Lo triste es que para muchos es divertido el molestar a las mujeres y diremos que los amantes de lo ajeno son también muy habilidosos para sacar de los bolsillos teléfonos y carteras por lo que al final, nadie se salva.

Cuando era joven y asistía a la feria con mis amigas, mis papás siempre hacían hincapié en que si bebía pidiera algo que estuviera cerrado para evitar que me dieran una bebida adulterada o con droga, ese fue uno de los mejores consejos que pudieron darme pues una y mil veces se repite esa historia con jovencitas que están muy alcoholizadas y algunas de ellas apenas con haber dado un trago a su vaso.

Algunos están en contra de enseñar a los hijos a tomar bebidas alcohólicas, sin embargo, cuando repetidamente vemos las mismas escenas de jovencitos en mal estado entonces es cuando reconsideramos la prudencia y los límites desde casa y no cuando el alcohol se volvió un problema.

El problema de la seguridad en la feria no son únicamente los acosadores sino también el alcohol, sabemos que la venta de bebidas embriagantes es el gran negocio y es de manera personal que se decide qué, cuanto y dónde comprar todo lo que se consume en el perímetro ferial.

Ahora que sabemos que el Punto Seguros, si vemos a una jovencita en mal estado o ser agredida por quien la acompaña podemos preguntarle si se encuentra bien e indicarle que hay puntos seguros en la feria en caso de que no logremos disuadirla de continuar de esa manera su marcha. La buena información puede salvar la vida de muchas personas.

Para ir a la feria hay que estar atentos, traer consigo pocas cosas personales y de valor, no perder de vista a sus seres queridos y por las dudas, como mi tía abuela, un seguro grande a la mano para darle un buen piquete al que se acerque de más.

Hasta pronto

Por La nieta de Adelita

Foto Claudia Castro