Médicos abusivos, mujeres violentadas

La casualidad me llevó a escuchar, los últimos meses, testimonios de mujeres que han sufrido violencia durante una visita al médico o han sido víctimas de malas prácticas y por ello su vida estuvo en peligro.

La verdad, es que en ocasiones no importa si se es una mujer fuerte o no cuando hay gente con mala leche se puede sufrir de algún tipo de negligencia o violencia sin especificar género, por ejemplo, hace un par de años el vecino de enfrente falleció al bajar del auto, cuando regresaba de urgencias, porque el enfermero que lo atendió, se equivocó y le suministró un medicamento que no le correspondía, teniendo un terrible resultado.

Sin embargo, aunque todos los humanos estamos propensos a eso hay un sin número de mujeres que han padecido o una negligencia o bien violencia por parte de su ginecólogo, específicamente.

Las quejas van desde malos partos hasta tocamientos impropios durante las revisiones médicas o en el tacto al momento del alumbramiento.

Cada charla fue muy enriquecedora, sin embargo, ninguna presentó cargos por los hechos y algunas de ellas, no pudieron hacer su vida cotidiana o sexual normal de nuevo.

El principal problema es el no denunciar, si bien la denuncia puede ser judicial o no también se puede poner una queja ante el Consejo Mexicano de Arbitraje Médico para que pongan cartas en el asunto y fin a la situación.

Es difícil creer que las denuncias prosperaran, es natural ante la corrupción y el desinterés de las autoridades, pero si no lo hacemos, entonces jamás cambiarán o se aplicarán las políticas públicas adecuadas.

Derechos humanos debería ampliar sus funciones para que también procedan estos casos de abuso y no únicamente con instituciones públicas.

Es denigrante que sucedan los casos de violencia de género una y otra vez sin que en realidad tengamos un cambio o por lo menos la piensen dos veces antes de agredir física o psicológicamente a una paciente.

Las mujeres con quienes hablé y me abrieron su corazón, en su mayoría, sufrieron esas desavenencias con médicos particulares por lo que, es importante el que nosotras conozcamos nuestros derechos y el cómo actuar en una situación de violencia en una consulta médica.

Dirá usted que exagero, pero si pregunta por lo menos 1 de cada diez de sus conocidas han sufrido o negligencia o abuso de algún tipo de un médico especializado en la salud de la mujer.

Como mujeres es importante el que sepamos cuales son los procedimientos en el consultorio y, sobre todo, si nuestro sexto sentido nos dice que algo no está bien, cambiar de médico.

La salud y la integridad son importantes por lo que es necesario que nos cuidemos y hagamos equipo para estar seguras y evitar que las malas prácticas se propaguen y en lugar de quemar a los médicos faltos de ética mejor propaguemos en la comunidad una lista de buenos doctores, por lógica deduciremos con quien no ir.

Unidas podremos lograr cambios.

Hasta pronto

La Nieta de Adelita

Foto Claudia Castro