«Porque las mujeres somos unas chingonas como lo dijo la señora que me corta el cabello ahí en mi barrio”, así arrancó  la primera edición de “Juntas y Sororas”, un proyecto de egreso de Isabel Martínez, de la licenciatura en Comunicación e Información de la Universidad Autónoma de Aguascalientes; que busca compartir y exponer el gran talento que tienen las mujeres de Aguascalientes. 

La tarde de este domingo el Corredor Caranza, en el marco del programa “Pa’ Dominguear” del Instituto Municipal Aguascalentense para la Cultura, se convirtió en el espacio sororo donde sin juzgar, compartieron diferentes mujeres sus talentos y habilidades en música, poesía, danza, cine, pintura, fotografía y escultura. 

La gestora del proyecto reconoció que no tiene aptitudes para las artes pero siempre había estado muy cerca de las disciplinas como consumidora y espectadora, “siempre tuve el interés de hacer algo por el arte pero no había tenido la visión, hasta que un día la universidad nos propusieron hacer una investigación y decidí enfocarme en cuántas artistas mujeres hay y por qué no se ven tantas en los eventos. Porque sí hay mujeres talentosas pero no hay presencia”. 

Tras el monitoreo decidió que debía gestionar un evento que permitiera exponer ese talento no visto por la falta de espacios, “empecé a indagar y recibí mucho apoyo de personas  e instituciones, fue difícil organizar todo yo sola pero la respuesta de las chavas fue maravillosa”. 

En la semblanza que solicitaba para la exposición se percató que la mayoría no se había atrevido a exponer, lo cual fue un elemento más para sentirse agradecida de la confianza para darse a conocer, “no puedo creer que esto ya se hizo posible, aquí vimos a tantas personas de todas las edades, siendo parte de este talento que tienen todas ellas”. 

Adelantó que Juntas y Sororas tendrá más ediciones con el fin de que más artistas puedan contar con un espacio propio, sin ataduras ni límites técnicos. 

De 32 propuestas que recibió en la convocatoria se expusieron 23, el resto no se logró acomodar en tiempos y espacios pero se quedó abierta la posibilidad de participar en la segunda edición, “yo no quiero limitarlas, quiero que muestren su talento, porque vamos a hacer más ediciones, vamos a seguir compartiendo juntas y sororas”. 

Como joven egresada, Isabel dijo sentirse orgullosa y agradecida por los resultados, “ha sido una forma de demostrarse a ellas y a mí que si no hay oportunidades pues hay que crearlas”, ahora espera que sea una propuesta que sirva de motivación para que más mujeres puedan atreverse a exponer, a gestionar espacios y a compartir.

Foto Claudia Castro