Esta mañana de lunes, los concesionarios del transporte público ATUSA reclamaron al Gobierno del Estado por las decisiones tomadas del retiro de unidades (que se encontraban fuera de norma) y la integración de nuevos camiones con el logotipo “YO VOY” como parte del Plan de Movilidad Estatal.
En esta ocasión la manifestación fue más severa colocando desde las 7:00 horas poco más de 40 camiones sobre la calle Madero en el centro de la ciudad obstruyendo todo paso vehicular, esto al tener el conocimiento de que por la mañana el gobernador Martín Orozco Sandoval, presentaría en Palacio de Gobierno el arranque del Proyecto de Movilidad de Aguascalientes “Yo Voy”.
Desde un principio, Seguridad Pública del Estado a través de su titular Porfirio Sánchez Mendoza, se les solicitó que respetaran el libre tránsito, y aunque siguieran su manifestación, permitieran el paso vehicular al ser horario muy activo en el centro y justo esa calle principal. A pesar de las constantes peticiones de las autoridades, los concesionarios y choferes, que además llevaron a sus hijas e hijos como escudo, continuaron con la colocación de los camiones a lo largo y ancho de la vialidad dejando sin llaves los vehículos para evitar ser movidos.
Pasadas las dos horas el conflicto empeoró generando un enfrentamiento a golpes entre los choferes y los elementos de la policía, al reaccionar negativamente por la llegada de grúas que pretendían retirar las unidades y dejar abierta la circulación.
Al haber tenido que solicitar apoyo de los grupos granaderos, los empujones y golpes no tardaron en efectuarse, las madres de los menores presentes en lugar de alejarlos de la zona de conflicto los mantenían cercanos a los camiones para evitar que los movieran.
El enfrentamiento dejó a 10 choferes y concesionarios detenidos y puestos a disposición del Ministerio Público, a quienes el vocero de ATUSA aseguró que se les logrará sacar en un par de horas por “no haber hecho nada malo”, negándose que se haya agredido a los policías ni violentado la ley.
Debido a los movimiento del uso de fuerza de los elementos, uno de los choferes detenidos sangró de la nariz, lo cual a consideración de Manuel de la Cruz Ricalde es una violación a sus derechos por lo que se presentará una queja ante la Comisión de Derechos Humanos.

Pasadas las 10:00 horas se acordó retirar las unidades por cuenta propia de los choferes con excepción de una unidad que tuvo que ser cargada por una grúa debido a que las llaves se las había llevado uno de los detenidos.
Foto Jorge Martínez / Claudia Castro